Ésta puede ser una de las frases más comunes de nuestros hijos en los próximos días. Desde la serenidad, como padre y/o madre considere estos puntos:

1.- Es primordial que nuestro hijo haya reconocido sus malas calificaciones, esto determinará cuáles han sido sus errores a la hora de atender en clase y estudiar con eficiencia. En el caso de que el niño no se vea afectado o justifique sus notas por culpa del profesor, comprenda que entre las tareas del profesor o maestro está la de evaluar las aptitudes y conocimientos de nuestro hijo por lo que ha de entender, y hacerle entender, que esas malas calificaciones son debido, en muchas ocasiones, a su bajo rendimiento como estudiante.

2.- Usted mejor que nadie conoce a su hijo. Por eso, quizá, detrás de esos suspensos existen otras razones. Hable con su hijo y, en cualquier caso, con su docente ya que puede haber algún problema emocional o físico que impida desarrollar su atención. Por ejemplo, la visión es uno muy frecuente. Está demostrado que un niño con alguna deficiencia visual no detectada a tiempo, condiciona sus malos resultados académicos.

3.- No se obsesione por las buenas notas. El estudio es un proceso y como tal tiene sus etapas de iniciación desarrollo y consolidación. Dichas etapas tienen su tiempo de progreso pero posiblemente estas etapas pueden verse alteradas, sobre todo, cuando un niño tiene alguna deficiencia anteriormente descrita.

4.- Ayude a su hijo a tener una saludable alimentación. Es otro problema, muchas veces descuidado. Piense que su hijo ha de tener los nutrientes necesarios para desarrollar su capacidad intelectual, concentración y atención.

5- Entienda que el estudio es una tarea familiar más que debe favorecer en su hogar. Tiene que crear el ambiente apropiado para que sus hijos desde pequeños estudien en buenas condiciones, controlando las tareas que deben realizar y el calendario de exámenes. Si por cuestiones laborales, no puede destinar tiempo a ello, valore la importancia que tiene la formación de su hijo ¿Le gustaría que le reprochase alguna vez que usted pasó de su vida académica? Valore, por tanto, su tiempo pero también el de los suyos.

6.- Conozca los deseos y vocación profesional de su hijo. Ha de ser un pilar básico para alcanzar su sueño en el futuro. No hay mayor satisfacción para un padre o madre que el éxito de su hijo debido, en cierta parte, a su apoyo incondicional.

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